Nuevos nombramientos de Categoría Académica

Profesoras Loreto Ascar y Valentina Parra manifiestan su alegría por nombramiento como Profesoras Asociadas de la Universidad de Chile

Loreto Ascar y Valentina Parra: Profesoras Asociadas U. Chile

Las profesoras Loreto Ascar, química, académica del Departamento de Química Inorgánica y Analítica, jefe de la carrera de Química, y la profesora Valentina Parra, bioquímica, académica del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular, recibieron recientemente su nombramiento como Profesoras Asociadas de la Universidad de Chile.

De esta forma, nuestra Facultad, además de celebrar esta nueva categoría académica, quiso conocer sus impresiones respecto a lo que significa para ellas este resultado de un esfuerzo de años de investigación y docencia, consultándoles sus impresiones y conociendo un poco más de sus trayectorias y vidas personales.

Profesora Loreto Ascar confiesa su gusto por la docencia

“Siempre contenta con las cosas que me van pasando en la vida y en la carrera y es un reconocimiento a lo que he hecho durante años. Partí siendo Instructora y llegar a ser Profesor Asociado es un reconocimiento al esfuerzo”, señaló la profesora Loreto Ascar, química y académica del Departamento de Química Inorgánica y Analítica.

Destaca que “me pasé de la Categoría Ordinaria a la Categoría Adjunta lo que significa que me voy a dedicar más a la docencia que a la investigación. Siempre me han gustado ambas áreas, trato de pasar la investigación a la docencia, en los laboratorios. A los estudiantes les hago trabajos donde aplican lo que es investigar, no sólo aplican memoria, me gusta mucho darles perspectiva en ese sentido”, cuenta. Añade que “y ahora me estoy pasando a la Categoría Académica donde seguiré en docencia, espero seguir con la jefatura de carrera que es algo que me gusta mucho y todo lo que pueda aportar en ese sentido para mí ha sido gratificante”.

La profesora Ascar relata que “asumí la jefatura de la carrera con un poco de temor en un principio, pero tratando de hacerlo de la mejor forma posible y creo que hemos logrado hartas cosas. Logramos terminar todo el proceso de la implementación de la malla, logramos validar todas las asignaturas de la malla y hemos estado trabajando en los electivos haciendo lo mismo. Asimismo, tratando de fortalecer las relaciones con los estudiantes que ha sido bastante bueno. He tenido muy buena llegada con los centros y he notado que tienen muchas ganas de aportar a la carrera”.

En relación a su anhelo de seguir en docencia, dijo que “retomé este año el curso Técnicas de Laboratorio que fue con lo primero que empecé en la Facultad y me gusta mucho que sea con los mechones”.

“Los mechones en el laboratorio lo pasan bien, les gusta. Ellos están entrando a carreras que son de hacer, donde la mayoría va a desenvolverse en laboratorios, entonces vienen con hartas ganas de aprender y eso es algo muy gratificante para uno como profesora porque sentir las ganas de ellos también te da energía”, comenta entusiasmada.

Cuenta que entró a estudiar Química en la Facultad en el año ’89. “Trabajé en mi tesis en el área analítica y me titulé de química. Luego de eso, empecé a trabajar como docente en la asignatura Técnicas de Laboratorio Químico e inicié mis estudios de Doctorado en Química en forma paralela. Terminé el doctorado con un poco de dificultad porque nació mi hijo y tuve que hacer las funciones de mamá y trabajar acá y además hacer el doctorado. Los tiempos fueron un poco más largos, pero logré hacer todo”, indica la profesora Ascar.

“Con el tiempo me hice cargo de la coordinación docente del Postítulo en el área Química, siendo también profesora del curso de Análisis Orgánico, lo que también fue muy bonito para mí”. “Fue un desafío cuando había pocos estudiantes que se acercaban a la asignatura y logramos captar mucha gente en ese periodo, apoyado por la llegada de los códigos Sence que permitió que llegara mucha gente, logrando varios cursos y después lo dejé por el nacimiento de mi segunda hija”, explica la académica.

“Una vez que me doctoré empecé a dictar cursos del área de química analítica, además de participar como consejera de departamento y consejera de la Escuela de Pregrado, siempre tratando de aportar”, continúa la profesora Ascar, añadiendo que “ahora también en este último tiempo me he ido haciendo cargo de los ramos de último año de la carrera de Química con la coordinación de las asignaturas de Anteproyectos de Memoria y Memoria de Título y también participando en la coordinación de los seminarios bibliográficos del Magister en Química, y docencia en algunas asignaturas”.

Respecto a su gusto por la Química, la profesora Ascar dice que “en el colegio me iba bien en química pero me empezó a gustar más estando acá. Me gusta mucho el trabajo de laboratorio, en un principio me encantaba la química orgánica y después que quedé en el área analítica y cuando estuve investigando me dediqué al área medioambiental que también me gusta mucho, evaluando contaminantes y haciendo matrices ambientales”.

La profesora Ascar está casada hace 25 años con José Hevia, también químico de nuestra Facultad, que trabaja en la empresa privada. “Tenemos dos hijos, Nicolás de 21 y Valentina de 15 que son mis dos grandes logros, en realidad. Mi mamá, Carmen, vive con nosotros, cumplirá pronto 87 años y es una bendición tenerla todavía”.

Entre sus aficiones personales confiesa que “me gusta bordar, pero no lo he hecho últimamente, y también me gusta coser”. Otra afición familiar que no han retomado después de la pandemia es la natación: “íbamos a nadar los cuatro y nos encanta. Somos todos de agua y viaje, siempre con el agua cerca”.

Profesora Valentina Parra: llegar a la titularidad para tener una mayor representación de mujeres en posiciones donde poder construir universidad

La profesora Valentina Parra, bioquímica, académica del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular, es Doctora en Bioquímica de la Universidad de Chile con más de 15 años de experiencia en investigación y docencia en los campos de la Bioquímica, Farmacología, Biología Celular y Fisiología.

Ha efectuado investigación en tres laboratorios fuera del país: en la Universidad de Liverpool (Inglaterra), Universidad de Utah y en la University of Texas Southwestern Medical Center en Dallas (éstas dos últimas, ambas en EEUU).

Durante los años de formación científica y académica, tanto en pregrado, posgrado y como investigadora postdoctoral, he estudiado la relación entre la morfología y la función mitocondrial en diferentes tipos celulares lo cual le ha permitido obtener diferentes reconocimientos a lo largo de su carrera, tanto nacionales como internacionales.

La profesora Parra cuenta que en enero de este año efectuó las gestiones solicitadas para la postulación como Profesora Asociada. Comenta que “entré a la Facultad en el año 2016 como Profesora Asistente”. “Tengo que agradecer al profesor Claudio Olea quien en ese momento era el presidente de Calificación Académica de la Facultad, y que me ayudó a ver qué áreas potenciar en mi curriculum”, añadiendo los aspectos que le sugirió enfocar.

Señala que en el año 2020 ya tuvo listo su curriculum, el que fue revisado de modo informal por los profesores Sergio Lavandero y Jenny Fiedler, y lo presentó a la Comisión Local de la Facultad, “y me fue super bien; ellos me evaluaron muy bien y de hecho quedaron comprometidos para ir a defender al comité central de calificación académica, donde participan profesores de toda la universidad y donde no todos conocen las áreas”. “Agradezco a quienes de la Facultad defendieron mi curriculum que fueron los profesores Jenny Fiedler y el profesor Marcelo Kogan, quienes previamente también me hicieron comentarios”.

La profesora Parra destaca la colaboración que tuvo de todos los profesores. “La construcción de academia es mucho más que llegar a investigar y hacer clases por lo que agradezco a Marcelo, Jenny, Sergio, Claudio, que han sido personas fundamentales en la construcción de mi carrera académica”.

Consultada acerca de las proyecciones que este nombramiento significa para su carrera, la profesora Parra señala “lo que se viene ahora es la titularidad, la que requiere un compromiso institucional que es super importante, por ejemplo, que uno empiece a participar más en más actividades directivas de la Universidad, pues si bien estoy en varios claustros académicos, me falta tener cargos más directivos”.

Destaca que en abril del 2020 inició su participación en la Oficina de Género y Diversidades Sexuales en la Facultad, reemplazando a la profesora Daniela Seelenfreund. “Postulé ahora para ser elegida en la Oficina de Género”, dijo.

Agregó que también es importante para la titularidad es el reconocimiento internacional. “Hay que ir construyendo una carrera académica y de investigación a ese nivel”.

“No es fácil ser profesora titular de la Universidad de Chile y nos es fácil en el contexto de ser mujer; en la Universidad de Chile es alrededor el 30 por ciento de las mujeres que llegan a ser titulares entonces. Sabemos que es complicado y sabemos que se juntan un sinfín de factores que se juntan para hacerlo aún más difícil. Yo agradezco a la gente que me ha ayudado en la construcción de la carrera y espero seguir contando con ellos en la construcción de este nuevo paso y poder llegar a la titularidad sobre todo para tener una mayor representación de mujeres en posiciones donde uno puede construir con su visión hacia donde podemos construir universidad”.

La profesora Parra tiene 40 años de edad y al referirse a su familia, comenta que “mi núcleo no es tan grande: mi pareja, Mauricio, que también es científico y académico y mi hija, Violeta, que cumple 4 años en junio". “No es tan fácil la doble militancia; ser académica, científica y mamá cuesta. El tema fundamental es tener, en este caso, un compañero que te acompañe de forma absolutamente democrática. Mauricio no me ayuda, Mauricio comparte absolutamente la crianza de Violeta, si no, no sería posible. En la casa es co-crianza, donde no está ella sino mantener la casa y otras cosas y en ese sentido hemos sido capaces de ayudarnos. Al principio la crianza nos estresó mucho, pero nos hizo salir muy fortalecidos en como distribuirnos las tareas domésticas que también son complejas. Este año nos ha tocado organizarnos en cosas tan triviales como quién la va a ir a buscar al colegio”, reconociendo que el estado de excepción debido a la pandemia la ha ayudado, así como la coordinación con su jefe de departamento, el profesor Alfonso Paredes.

Su pareja, Mauricio Latorre, es académico de la Universidad de O’Higgins en Rancagua y profesor adjunto del INTA de la Universidad de Chile.

Nuestra Facultad felicita a ambas académicas por el logro obtenido!

 

 

Últimas noticias

Más noticias